"....Levántate sobre la última sílaba del tiempo que recordamos, levántate,
terrible y seguro, imponiendo tu sombra a la luz de la vida..."
Gastón Baquero
Picasso
Justo antes de morir estaba solo,
yo no quise compañía, ni hacer prevalecer
la fría y última visión sellada con dolor
y no quería ser el saco abierto
con pudor de un ataúd,
bajo los gavanzos del gris túmulo.
Amaba tanto a la soledad
y nunca vino con las manos sueltas,
hasta el final de mi sonido,
a enfrentarme...
¡era tan insignificante!
Y la misma mujer, de únicas semillas,
mi vieja compañera
me dejó un montón de poemas
que eran su secreto,
para juntarlos en mis cenizas
para siempre.
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