Edward Hopper
Salta nuestro balcón
el rocío neutro.
Le he visto un guiño de lluvia
y la sonrisa fresca
en el aire que no recuerda
sus modales de septiembre.
Enloquece silbando
envejecido e inmóvil
ya en la tarde de ropaje oscuro.
Y la puerta melancólica de alusión
se deja cruzar el pelo rubio,
que el alba imitaba con su aliento.
Hoy no estuvo lejos el hastío
orobanche tenaz, que no huye
del sonrosado insomnio
dando vueltas desvaídas
en el cuello de las horas.
Y no medraron mis ojos
cercados como una libélula
cercados como una libélula
que no ha cazado al resplandor.
Comentario de Emilio Hace 17 horas
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Muy bello, Manuel. Es un poema para meditarlo detenidamente.
Un saludo.
Emilio.
Comentario de Marysol Salval Hace 15 horas
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Hermoso poema que atrapa con maestría un bello momento: la lluvia a destiempo, el viento, el hastío ...Todo excelente....Me encantó, besos
Comentario de Olga Lucía Florio Hace 13 horas
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HERMOSO POEMA A UN MOMENTO DE MELANCOLÍA, DONDE EL TIEMPO JUEGA UN PAPEL IMPORTANTE, FELICITACIONES.
COINCIDO CON EL COMENTARIO DE LUCÍA ES UN POEMA NOSTÁGICO PERO BELLÍSIMO ES COMO SI COMENZARA A ENTRAR EL OTOÑO EN LA VIDA DEL SER HUMANO
ResponderEliminarComentario de Aur R.C. Hace 3 horas
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La belleza del dolor muchas veces arranca,¡ paradojas! suspiros de placer.
Es un gran poema escrito con pluma sabia.
Un placer.
Un saludo
El tuareg