viernes, 16 de noviembre de 2012

Soledad





Lovis Corinth


Lo que ha venido a suceder
a mi par de rocas alígeras
no sé si es el agua; astuta humedad traviesa
rompiendo la semilla del poema a ras del suelo.
Ha debido ser una caída atragantada
en el techo pulcro que aún no me alcanza,
el techo con sus cargadas lonjas blancas.
¿O sólo necesitan ellos comprobarse?
Su oftálmico ademán de exprimirme
la llama que no existe en mi cordura.
No es el momento –pienso- de borrar con agua clara
el estirado jardín de mis fantasmusas
y nublar su inalienable masa de memoria.
A ese standing de muerte nada de translucidez
ni le cedo el agua que dispongo aquí en mi tuero;
porque a su arruinada bocanada no le sirve
la herramienta árida de mi incauto silencio.
Todo lo que necesitan mis haces incorporados
es la cintura batida que subsiste a la paciencia.
Todo lo que puedo disparar son versos tenues
en su altar, como un aguacero inválido
que le enredo el hábito de fruta lista.
La curvada soledad crea joyas aladas
que elevan sus timbres, rajan el aire
amasando el nervudo soplo furibundo
de pedir amor naturalmente.


7 comentarios:

  1. Comentario de Luis Madrigal el noviembre 16, 2012 a las 8:32pm
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    Querido Manolo: Creo haber conocido bien -lo conocí cuando no escrbía poemas- ese impúdico ademán oftálmico que causa el tipo de soledad a la que cantas, o contra la que te rebelas con mansedumbre tan sólo disparando versos. Pero no podrá ser vencida y aniquilada hasta el final de la Historia. Por otra parte, ni se hizo nunca la miel para la boca del asno, ni la Poesía podrá amansar nunca a las fieras, pese a ser hermana gemela de la Música. No en vano Lovis Corinth, encontró en Charlotte Berend, veinte años más joven que él, además de la esposa y madre de sus hijos una musa inspiradora, que transformó su soledad en la más dulce de las compañías. ¿Acaso no lo acredita el famoso cuadro que me permito acompara a continuación?:
    Un fuerte abrazo, Manolo. Luis Madrigal.-

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  2. Gloria Eugenia Lemus2 de diciembre de 2012, 8:37

    Comentario de Gloria Eugenia Lemus B. el noviembre 16, 2012 a las 9:10pm
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    Mi querido Pedro Manuel, hoy en tu hermoso texto crepitan los eternos silencios, y rebotan en tu habitación donde solo te acompañan los sentimientos que se van desparramando inertes, como la cera que escurre de la vela que se niega a apagarse, aferrada a su última esperanza.
    Cuanta ingratitud hay en la soledad que avasalla.
    Me encanto amigo, y como siempre te aplaudo con infinita admiración.
    Un beso.

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  3. Comentario de Aur R.C. el noviembre 17, 2012 a las 6:31am
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    La soledad. Compartida, acompañada o buscada.La soledad que acompaña estando acompañado, porque nunca el cuerpo está solo es la mente la que suele estarlo, sobre todo en aquel que habla y siente la inquietud de las cosas que son menester hacer o transformar.
    Muy buen escrito,como siempre.
    Un saludo.
    El tuareg

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  4. Comentario de Manuel del Pinar el noviembre 17, 2012 a las 8:06am
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    Muchas gracias por esos espléndidos comentarios y una gracia especial a ese cuadro excepcional que me regala Luis, de este pintor que me encandiló en "Desfile de modelos" una obra de 1921, tan actual y fresca que al tenerla cerca parece recién pintada. Cuentan que su desparpajo y fuerza se debió a una paralización parcial que sufrió en 1911 por un infarto cerebral. Para mí se adelanta a muchos otros de su época y a pesar de pertenecer al impresionismo alemán, es un expresionista en ciernes. Como dato curioso agrego que Charlotte Berend fue alumna suya, de un talento especial, bastante nublado por la magia de Lovis que opacaba ese pincel ágil de su propia musa.

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  5. Comentario de Julia del Prado el noviembre 17, 2012 a las 1:56pm
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    que puedo decir ante este cuadro magnìfico. Abrazos

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  6. Ana María Hernández2 de diciembre de 2012, 8:39

    Comentario de ANA MARÍA HERNÁEZ el noviembre 23, 2012 a las 4:57pm
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    UN BELLO Y COMO TÚ DICES DESOLADO POEMA AUNQUE A VECES ES BUENO ESTAR EN SOLEDAD CON UNO MISMO ASOLAS CON NUESTOS PENSSAMIENTOS Y DUDAS PERO NO HAY QUE ABUSAR Y VOLVERS UN ERMITAÑO

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  7. Marita Ragozza de Mandrini2 de diciembre de 2012, 8:40

    Comentario de Marita Ragozza de Mandrini el noviembre 24, 2012 a las 7:55pm
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    Cada uno crea su propia soledad. Y me voy, pocas palabras, con tus metáforas a aspirar el cielo y con los ojos plenos de las pinturas que acompañan tus letras y los comentarios.
    Una obra destacadísima.
    Felicitaciones y abrazo.

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